Wednesday, January 25, 2017

La nota que nunca envié

Queridos Sobrinos: Por favor no me tomen a mal, lo que siento y hago es consecuencia de una obligación legítima a una situación que escapa de nuestras manos. Estoy consciente de que algunos de ustedes les molesta que le toquen el tema; bueno, en ese caso lo lamento, sin embargo, eso no cambia en nada los hechos que están a la vista y por suficiente tiempo como para autonegarselos. El punto es que, como dice Fausto Maso en un artículo reciente: “Abran Los Ojos, No Vamos a Ninguna Parte”. Si no lo han leído háganlo, vale la pena. http://www.elnacional. com/noticias/columnista/abran-los-ojos-vamos-ninguna-parte_76647 El hecho es que el país dónde nacimos, nos educamos y crecimos no existe; solo quedan escombros y una geografía bella pero sin ley ni futuro. Esto es un hecho que a esta altura es indiscutible. Bueno, en ese país es dónde están ustedes dejando a sus hijos crecer y desarrollarse. Analicen cuales serán sus oportunidades como seres humanos y profesionales. Eso es precisamente lo que me preocupa. Quizás ustedes se molestaran pensando que ese no es mi problema; de nuevo, lo lamento. Sin embargo, si será el de ustedes cuando vean sus frustraciones (las de ustedes y de sus hijos) al no tener motivación de futuro; eso me produce una profunda tristeza. Ojalá no ocurra y yo esté bien equivocado; los hechos no indican eso de todas formas. Tengan consciencia que ustedes son los responsables, los adultos, de labrar el camino para que sus hijos lo sigan. No se si han escuchado sobre el tema “confort zone”; salir de allí es sumamente difícil pero a veces es inevitable como es el caso hoy día. Piénsenlo y pongan sus prioridades en orden y tomen sus propias decisiones con coraje; “no hay peor decisión que la que no se toma”, “no existen soluciones perfectas pero si las oportunas”. Dios los Bendiga y los proteja ahora y siempre. Un tío fastidioso y mono-temático. PD. Por favor no me respondan mi; respóndanse a ustedes mismos!